Dolor de amor

No sabia que el amor era tan impredecible,

creía que eternidad existía en promesas humanas y mortales, 
que saben solo ser falsos,

que a veces se disfraza de verdad ,

pero se esfuma al mirar sus pupilas,

como mariposa que feneció entre la playa arenosa,

que con gotas de lluvia hoy se humedece,
 y ella se hunde muerta y sin voz......

mientra su alma camina descalza sobre la blanca franja,

que va siendo gris mientras las horas pasan,

pensó que las palabras le  hacían vibrar

hoy solo sabe que la hacen dudar,

creyó que quedarían grabados hasta el final,

aquel amor que duele tanto,

aquel recuerdo que ayer  fue profundo,

que parecía interminable

 que  era perfecto,

hoy solo es un suspiro con sabor a miedo,

con sensación de desdén...

¿como puede vivir una ave,

sin las plumas que abrigaban sus soledades?

tratará de esperar dormida,

mientras pasa el temible tiempo

deslizando los segundos

y sumando los días
que ahondan el llanto

que hasta a Dios conmueve;

curará la herida ensangrentada

de la ciega que supo amar,

de la muda aprendió a hablar

por tantos besos antes de llegar al altar.

Secretos para el amor

Murmullo & Paraíso

Tanta inspiración hoy se desvanece

como gotas de aquella nieve 

que al salir el sol se evapora

sin dejar su fresco rastro

entre las hojas vivas de la verde pradera

que ajena y enojada

cambia su apariencia

celosa y tímida de tanta hermosura

que se deja adornar orgullosa

con colores de las rosas mas hermosas

que dejaron sus espinas clavadas en el olvido

sin tener nada imperfecto

ante los ojos puros que jamas lo vieron

que se gana aplausos con sabor a envidia

que se lleva logros levantando a las malezas

y provocando al viento

que entre tanto verdor se confunden

y entre tantas voces forman un coro

que el oído percibe 

detectando solo ecos descifrables

criticando la dulzura que diseñado esta en el horizonte

que en sombra solo ahonda las raíces del árbol

que antes causó impresión

que imitar es imposible

por que Dios así lo hizo

y en cada anochecer cierran sus hojas

como puertas de aquella mansión encantada

que con el puro amor se abre apasionada.